domingo, 31 de enero de 2010

Reflexiones conspiranoicas

SISTEMA; sólo con oir ese nombre pasan por mi mente multitud de sensaciones, desde ¿quien domina el sistema, quien logra mantenerse al margen, real mente somos libres o simplemente somos seres pluricelulares con la capacidad de consumir y algunas fuciones más?
Hace tiempo tuve una de mis numerosas conversaciones psico-sociales con un amigo durante casi toda la tarde, y al final de tantas palabras y mensajes entre emisor y receptor, retumbaba en mi mente un nombre cuanto menos curioso de nuevo ...SISTEMA.

Cada vez estoy mas seguro que el eje que mueve el mundo es contraproducente con la libertad del individuo, es más resulta antagónico con la naturaleza humana.
Los gobernantes entran en una espiral en la que cada vez nos limitan más nuestros movimientos mentales, nos bombardean con televisión creada para amaestrar auténticos borregos, Convertirnos en mano de obra barata, consumidores compulsivos , lo que mas me aterra es que se pretende acabar con la jerarquía por definición; la familia.
Este gobiero de pandereta que nos toca sufrir hoy en día utiliza tanto como otros gobiernos extranjeros ( por no decir todos) la politica de desinformación, para que estemos eclipsados en cosas tan falsas como la gripe A, la ley del aborto, la edad de jubilación...
La verdad que la de la jubilación resulta cuanto más curioso, cualquier persona se tendrá que jubilar en principio a los 67 años , pero con intención de aumentarse hasta los 70.
Es que ante esta"desaceleración económica" que podemos palpar hay que sacar dinero de donde sea....del pueblo.
Es que lamentablemente para el sistema la esperanza de vida en España roza los 81 años y claro no interesa tener a millones de pensionistas cobrando sus pensiones ganadas honradamente.
Pero nunca pasa nada por que todo en la vida es cíclico, y vivimos en un constante "deja vu"que casualmente maneja el sistema.
Lo cierto es que cada vez esta sociedad me empieza a recordar a otra de ficción que recogió George Orwel en su novela póstuma 1984.
¿Cooincidencias? ¿deja vu? Juan Carlos.

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